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POTYLDA 110F
2174 posts
6/22/2023 12:26 pm

Last Read:
6/22/2023 1:04 pm

NUESTRO GATO VASKA. ANÓNIMO. TEXTO SELECCIONADO Y EDITADO POR CECILIA R SALAS





Esta historia puede leerse en un MUSEO DE SAN PETERSBURGO, RUSIA.

CECILIA ✍️ ✍️ ✍️ ✍️ ✍️



NUESTRO GATO VASKA. ANÓNIMO. TEXTO SELECCIONADO Y EDITADO POR CECILIA R SALAS

"Mi abuela siempre dijo que tanto ella como mi madre sobrevivieron al asedio de LENINGRADO por los nazis (1941-1944), gracias a su gato VASKA.

De no haber sido por ese astuto pelirrojo desvergonzado, ambas habrían muerto de hambre, como muchos otros.

Cada día, VASKA salía a cazar y traía de regreso a casa un ratón o, incluso, una gran rata.

Estos roedores abundaban porque los sobrevivientes de los bombardeos se comían a los gatos. De ahí que, en plena invasión enemiga, se desataran, además, plagas de ratas, lo que complicaba aún más el escenario.

Mi abuela destripaba a los ratones que cazaba VASKA y hacía estofado con ellos, mientras que con las ratas, lograba hacer un buen goulash.

El gato siempre se sentaba junto a la abuela, y esperaba su turno para comer. Durante la noche, los tres se cobijaban bajo la misma frazada y él las adormecía con su ronroneo.

El hambre era terrible. VASKA estaba flaco y siempre hambriento, como todos los demás. Durante el transcurso del invierno, mi abuela guardaba migajas para los pájaros y, cuando llegaba la primavera, salía cazarlos, junto a VASKA.

Ella esparcía las migajas y luego se ocultaba con
el gato, para emboscarlos; el salto de VASKA siempre era sorprendentemente preciso y rápido.

No obstante, VASKA estaba tan desnutrido como ellas, y ya no contaba con fuerzas suficientes para matar al pájaro. Por ello, mi abuela dejaba que él solamente los atrapara y luego ella se encargaba del resto.

De esta manera, durante la primavera y el otoño, los tres tan sólo comían pájaros.

VASKA siempre se percataba de los bombardeos, mucho antes de que pudieran escuchar el ruido de los motores de los aviones enemigos.

Cuando se ponía inquieto y maullaba con angustia, mi abuela sabía que era el momento de tomar algo de ropa, un poco de agua, a mi madre, al gato y huir de casa.

Cuando había que ponerse a salvo en un refugio antibombas, vigilaban a VASKA de cerca, para que nadie pudiera llevárselo y comérselo.

A estas alturas de la guerra, VASKA estaba muy débil, pero muy presente en su familia, como hoy su hazaña lo está en los museos rusos.

Cuando por fin se levantó el bloqueo de la ciudad y volvió a llegar comida, e incluso después de la guerra, mi abuela siempre guardaba los mejores bocados para el gato. Ella lo acariciaba cariñosamente, mientras le decía: “eres nuestro sostén”.

VASKA murió en 1949 y mi abuela se las arregló para sepultarlo en el cementerio. Para que nadie pisoteara su tumba, colocó una cruz en donde se leía VASILY BUGROV.

Cuando llegó su momento, mi madre sepultó a mi
abuela junto al gato y, luego, yo sepulté a mi madre junto a ellos.

Hoy, los tres yacen bajo la misma lápida: los tres juntos, bajo la misma manta, como cuando la guerra.








CECILIA


POTYLDA 110F
2039 posts
6/22/2023 1:04 pm




Muchas gracias a todos
los lectores que
visitan mi Blog,
honrándome con el privilegio de su
atención e
inapreciable tiempo.

Aprovecho la oportunidad para
desearles a todos que logren ser felices siempre, sea cual sea la realidad que les toque vivir,
invitándoles, como siempre, a que
continúen visitando mi espacio, que es
también el suyo, lugar en donde
siempre serán cordial y
afectuosamente bienvenidos.

Saludos solidarios e istmeños de

CECILIA







CECILIA