Lucas y sus largas marchas
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Posted:Oct 12, 2007 8:45 am
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 8643 Views
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________________________________________ Todo el mundo sabe que la Tierra está separada de los otros astros por una cantidad variable de años luz. Lo que pocos saben (en realidad, solamente yo) es que Margarita está separada de mà por una cantidad considerable de años caracol. Al principio pensé que se trataba de años tortuga, pero he tenido que abandonar esa unidad de medida demasiado halagadora. Por poco que camine una tortuga, yo hubiera terminado por llegar a Margarita, pero en cambio Osvaldo, mi caracol preferido, no me deja la menor esperanza. Vaya a saber cuando se inicie la marcha que lo fue distanciando imperceptiblemente de mi zapato izquierdo, luego que lo hube orientado con extrema precisión hacia el tumbo que lo llevara a Margarita. Repleto de lechuga fresca, cuidado y atendido amorosamente, su primer avance fue promisorio, y me dije esperanzadamente que antes de que el pino del patio sobrepasara la altura del tejado, los plateados cuernos de Osvaldo entrarÃan en el campo visual de Margarita pare llevarle mi mensaje simpático; entretanto, desde aquà podÃa ser feliz imaginando su alegrÃa al verlo llegar, la agitación de sus trenzas y sus brazos. Tal vez los años luz todos iguales, pero no los años caracol, y Osvaldo ha cesado de merecer mi confianza. No es que se detenga, pues me ha sido posible verificar por su huella argentada que prosigue su marcha y que mantiene la buena dirección, aunque esto suponga pare el subir y bajar incontables paredes o atravesar Ãntegramente una fábrica de fideos. Pero más me cuesta a mà comprobar esa meritoria exactitud, y dos veces he sido arrestado por guardianes enfurecidos a quienes he tenido que decir las peores mentiras puesto que la verdad me hubiera valido una lluvia de trompadas. Lo triste es que Margarita, sentada en su sillón de terciopelo tosa, me espera del otro lado de la ciudad. Si en vez de Osvaldo yo me hubiera servido de los años luz, ya tendrÃamos nietos; pero cuando se ama largo y dulcemente, cuando se quiere llegar al término de una paulatina esperanza, es lógico que se elijan los años caracol. Es tan difÃcil, después de todo, decidir cuales las ventajas y cuales los inconvenientes de estas opciones.
Cortazar ________________________________________
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Alma desnuda
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Posted:Jun 13, 2007 5:33 pm
Last Updated:Jun 4, 2008 1:08 pm 8521 Views
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Soy un alma desnuda en estos versos, Alma desnuda que angustiada y sola Va dejando sus pétalos dispersos.
Alma que puede ser una amapola, Que puede ser un lirio, una violeta, Un peñasco, una selva y una ola.
Alma que como el viento vaga inquieta Y ruge cuando está sobre los mares, Y duerme dulcemente en una grieta.
Alma que adora sobre sus altares, Dioses que no se bajan a cegarla; Alma que no conoce valladares.
Alma que fuera fácil dominarla Con sólo un corazón que se partiera Para en su sangre cálida regarla.
Alma que cuando está en la primavera Dice al invierno que demora: vuelve, Caiga tu nieve sobre la pradera.
Alma que cuando nieva se disuelve En tristezas, clamando por las rosas con que la primavera nos envuelve.
Alma que a ratos suelta mariposas A campo abierto, sin fijar distancia, Y les dice: libad sobre las cosas.
Alma que ha de morir de una fragancia De un suspiro, de un verso en que se ruega, Sin perder, a poderlo, su elegancia.
Alma que nada sabe y todo niega Y negando lo bueno el bien propicia Porque es negando como más se entrega.
Alma que suele haber como delicia Palpar las almas, despreciar la huella, Y sentir en la mano una caricia.
Alma que siempre disconforme de ella, Como los vientos vaga, corre y gira; Alma que sangra y sin cesar delira Por ser el buque en marcha de la estrella
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El árbol de los amigos
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Posted:May 22, 2007 6:15 pm
Last Updated:Jul 29, 2007 7:28 pm 8624 Views
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Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino. Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, mas otras apenas vemos entre un paso y otro. A todas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos.
Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos. El primero que nace del brote es nuestro amigo papá y nuestra amiga mamá, que nos muestra lo que es la vida. Después vienen los amigos hermanos, con quienes dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como nosotros. Pasamos a conocer a toda la familia de hojas a quienes respetamos y deseamos el bien.
Mas el destino nos presenta a otros amigos, los cuales no sabÃamos que irÃan a cruzarse en nuestro camino. A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, de corazón. sinceros, verdaderos. Saben cuando no estamos bien, saben lo que nos hace feliz.
Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en nuestro corazón y entonces es llamado un amigo enamorado. Ese da brillo a nuestros ojos, música a nuestros labios, saltos a nuestros pies. Mas también hay de aquellos amigos por un tiempo, tal vez unas vacaciones o unos dÃas o unas horas. Ellos acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro, durante el tiempo que estamos cerca.
Hablando de cerca, no podemos olvidar a amigos distantes, aquellos que están en la punta de las ramas y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre una hoja y otra. El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas, algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones. Pero lo que nos deja más felices es que las que cayeron continúan cerca, alimentando nuestra raÃz con alegrÃa. recuerdos de momentos maravillosos de cuando se cruzaron en nuestro camino.
Te deseo, hoja de mi árbol, paz, amor, salud, suerte y prosperidad. Simplemente porque cada persona que pasa en nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sà y se lleva un poco de nosotros.
Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrán de los que no nos dejarán nada. Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida y la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad.
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HAY UN DÍA FELIZ
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Posted:Mar 12, 2007 4:54 pm
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 8843 Views
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A recorrer me dediqué esta tarde Las solitarias calles de mi aldea Acompañado por el buen crepúsculo Que es el único amigo que me queda. Todo está como entonces, el otoño Y su difusa lámpara de niebla, Sólo que el tiempo lo ha invadido todo Con su pálido manto de tristeza. Nunca pensé, creédmelo, un instante Volver a ver esta querida tierra, Pero ahora que he vuelto no comprendo Cómo pude alejarme de su puerta. Nada ha cambiado, ni sus casas blancas Ni sus viejos portones de madera. Todo está en su lugar; las golondrinas En la torre más alta de la iglesia; El caracol en el jardÃn, y el musgo En las húmedas manos de las piedras. No se puede dudar, éste es el reino Del cielo azul y de las hojas secas En donde todo y cada cosa tiene Su singular y plácida leyenda: Hasta en la propia sombra reconozco La mirada celeste de mi abuela. Estos fueron los hechos memorables Que presenció mi juventud primera, El correo en la esquina de la plaza Y la humedad en las murallas viejas. ¡Buena cosa, Dios mÃo!; nunca sabe Uno apreciar la dicha verdadera, Cuando la imaginamos más lejana Es justamente cuando está más cerca. Ay de mÃ, ¡ay de mÃ!, algo me dice Que la vida no es más que una quimera; Una ilusión, un sueño sin orillas, Una pequeña nube pasajera. Vamos por partes, no sé bien qué digo, La emoción se me sube a la cabeza. Como ya era la hora del silencio Cuando emprendà mi singular empresa, Una tras otra, en oleaje mudo, Al establo volvÃan las ovejas. Las saludé personalmente a todas Y cuando estuve frente a la arboleda Que alimenta el oÃdo del viajero Con su inefable música secreta Recordé el mar y enumeré las hojas En homenaje a mis hermanas muertas. Perfectamente bien. Seguà mi viaje Como quien de la vida nada espera. Pasé frente a la rueda del molino, Me detuve delante de una tienda: El olor del café siempre es el mismo, Siempre la misma luna en mi cabeza; Entre el rÃo de entonces y el de ahora No distingo ninguna diferencia. Lo reconozco bien, éste es el árbol Que mi padre plantó frente a la puerta (Ilustre padre que en sus buenos tiempos Fuera mejor que una ventana abierta). Yo me atrevo a afirmar que su conducta Era un trasunto fiel de la Edad Media Cuando el perro dormÃa dulcemente Bajo el ángulo recto de una estrella. A estas alturas siento que me envuelve El delicado olor de las violetas Que mi amorosa madre cultivaba Para curar la tos y la tristeza. Cuánto tiempo ha pasado desde entonces No podrÃa decirlo con certeza; Todo está igual, seguramente, El vino y el ruiseñor encima de la mesa, Mis hermanos menores a esta hora Deben venir de vuelta de la escuela: ¡Sólo que el tiempo lo ha borrado todo Como una blanca tempestad de arena!
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HORAS DE SUEÑO NECESARIAS PARA UN BUEN DESCANSO
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Posted:Feb 21, 2007 3:43 pm
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 9017 Views
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Dormir es un factor muy importante dentro de nuestras vidas. Cuando dormimos descansamos y nuestro cuerpo puede renovar la energÃa.
Napoleón dormÃa poquÃsimo. Se acostaba entre las 10 y las 12, dormÃa hasta las 2, trabajaba hasta las 5 y volvÃa a dormir hasta las 7. Otro tanto hacÃan Edison y Churchill, que se saciaban con tandas de 4 horas, y Salvador DalÃ, que sólo suscribÃa esa dieta si la personalizaba: se instalaba en un sillón, dejaba en el piso un plato de metal y se abandonaba al sueño con una cucharita entre los dedos; dormido, los dedos se le relajaban, la cuchara caÃa golpeando contra el plato y el pintor, alertado por el modesto estrépito, despertaba y reanudaba el reloj reblandecido que habÃa dejado inconcluso.
A juzgar por la bibliografÃa especializada, entre los fanáticos de la vigilia y los dormilones no hay punto de comparación –al menos cuantitativa–. A los primeros se los colecciona; para contar a los otros sobran los dedos de una mano. El marmota más célebre fue sin duda Einstein, que no movÃa una neurona si no habÃa dormido un mÃnimo de diez horas.
Durante los últimos cien años las horas de sueño se han reducido al menos un 20 por ciento, es decir, casi dos horas diarias. Según el profesor Jorge Alberto Costa de Silva, de la Universidad de Nueva York, este hecho se debe al estrés motivado por el nuevo ritmo de vida. Por este motivo, la Federación Mundial de Sociedades de Investigación del Sueño, junto con la Organización Mundial de la Salud (OMS) han decidido designar al 21 de marzo DÃa Internacional del Sueño.
Los españoles se encuentran entre los que más tarde se acuestan y menos duermen en toda Europa. El 65 por ciento declaran estar levantados pasada la medianoche y además figuran entre los que más tarde se levantan, pues el 28% lo hacen entre las 8 y 9 de la mañana. Igualmente, los españoles y portugueses los que duermen menos tiempo, seis horas o menos, sólo superados por parte de los austriacos, de los cuales el 19% duerme menos de menos de seis horas diarias.
Nuestras costumbres socioculturales tienen mucho que ver con esto: solemos terminar tarde de trabajar, cenamos aún más tarde y nos acostamos entre las 12 de la noche y la 1 de la madrugada, por término medio. Sin embargo, al dÃa siguiente nos levantamos a la misma hora que el resto de europeos. felipillocl hotmail.com
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El hombre imaginario
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Posted:Jan 15, 2007 10:38 am
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 9039 Views
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El hombre imaginario vive en una mansión imaginaria rodeada de árboles imaginarios a la orilla de un rÃo imaginario
De los muros que imaginarios penden antiguos cuadros imaginarios irreparables grietas imaginarias que representan hechos imaginarios ocurridos en mundos imaginarios en lugares y tiempos imaginarios
Todas las tardes tardes imaginarias sube las escaleras imaginarias y se asoma al balcón imaginario a mirar el paisaje imaginario que consiste en un valle imaginario circundado de cerros imaginarios
Sombras imaginarias vienen por el camino imaginario entonando canciones imaginarias a la muerte del sol imaginario
Y en las noches de luna imaginaria sueña con la mujer imaginaria que le brindó su amor imaginario vuelve a sentir ese mismo dolor ese mismo placer imaginario y vuelve a palpitar el corazón del hombre imaginario.
Nicanor Parra
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Amante Bandido
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Posted:Dec 19, 2006 11:36 am
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 9143 Views
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Yo seré el viento que va Navegaré por tu oscuridad Tu rocÃo, beso frÃo, que me quemará
Yo seré tormento y amor Tú la marea que arrastra a los dos Yo y tú, tú y yo... si!...no dirás que no No dirás que no... no dirás que no...
Seré tu amante bandido, bandido Corazón, corazón mal herido Seré tu amante cautivo, cautivo Seré...
Pasión privada adorado enemigo Huracán, huracán abatido Me perderé en un momento contigo Por siempre...
Yo seré un hombre por tà Renunciaré a ser lo que fuà Yo y tú, tú y yo... sin misterio Sin misterio... sin misterio...
Seré tu amante bandido, bandido Corazón, corazón mal herido Seré tu amante cautivo, cautivo Seré...
Pasión privada adorado enemigo Huracán, huracán abatido Me perderé en un momento contigo Por siempre...
Seré tu héroe de amor, seré tu héroe de amor Seré tu héroe...
Seré el amante que muere rendido Corazón, corazón mal herido Seré tu amante bandido, bandido Seré...
Y en un oasis prohibido, prohibido Por amor, por amor concebido Me perderé en un momento contigo Por siempre... seré tu héroe de amor
Seré tu héroe de amor Seré tu héroe.
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cambios de nombre; ¿ yporque no??
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Posted:Nov 19, 2006 7:38 pm
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 9249 Views
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A los amantes de las bellas letras Hago llegar mis mejores deseos Voy a cambiar de nombre a algunas cosas.
Mi posición es ésta: El poeta no cumple su palabra Si no cambia los nombres de las cosas.
¿Con qué razón el sol Ha de seguir llamándose sol? ¡Pido que se llame Micifuz El de las botas de cuarenta leguas!
¿Mis zapatos parecen ataúdes? Sepan que desde hoy en adelante Los zapatos se llaman ataúdes. ComunÃquese, anótese y publÃquese Que los zapatos han cambiado de nombre: Desde ahora se llaman ataúdes.
Bueno, la noche es larga Todo poeta que se estime a sà mismo Debe tener su propio diccionario Y antes que se me olvide Al propio dios hay que cambiarle nombre Que cada cual lo llame como quiera: Ese es un problema personal. Nicanor Parra
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Juro que no recuerdo ni su nombre!!!!!!!!!!!!!!!!!
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Posted:Nov 14, 2006 6:47 am
Last Updated:Apr 23, 2007 9:14 pm 9700 Views
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Juro que no recuerdo ni su nombre, Mas moriré llamándola MarÃa, No por simple capricho de poeta: Por su aspecto de plaza de provincia. ¡Tiempos aquellos!, yo un espantapájaros, Ella una joven pálida y sombrÃa. Al volver una tarde del Liceo Supe de la su muerte inmerecida, Nueva que me causó tal desengaño Que derramé una lágrima al oÃrla. Una lágrima, sÃ, ¡quién lo creyera! Y eso que soy persona de energÃa. Si he de conceder crédito a lo dicho Por la gente que trajo la noticia Debo creer, sin vacilar un punto, Que murió con mi nombre en las pupilas. Hecho que me sorprende, porque nunca Fue para mà otra cosa que una amiga. Nunca tuve con ella más que simples Relaciones de estricta cortesÃa, Nada más que palabras y palabras Y una que otra mención de golondrinas. La conocà en mi pueblo (de mi pueblo Sólo queda un puñado de cenizas), Pero jamás vi en ella otro destino Que el de una joven triste y pensativa Tanto fue asà que hasta llegué a tratarla Con el celeste nombre de MarÃa, Circunstancia que prueba claramente La exactitud central de mi doctrina. Puede ser que una vez la haya besado, ¡Quién es el que no besa a sus amigas! Pero tened presente que lo hice Sin darme cuenta bien de lo que hacÃa. No negaré, eso sÃ, que me gustaba Su inmaterial y vaga compañÃa Que era como el espÃritu sereno Que a las flores domésticas anima. Yo no puedo ocultar de ningún modo La importancia que tuvo su sonrisa Ni desvirtuar el favorable influjo Que hasta en las mismas piedras ejercÃa. Agreguemos, aún, que de la noche Fueron sus ojos fuente fidedigna. Mas, a pesar de todo, es necesario Que comprendan que yo no la querÃa Sino con ese vago sentimiento Con que a un pariente enfermo se designa. Sin embargo sucede, sin embargo, Lo que a esta fecha aún me maravilla, Ese inaudito y singular ejemplo De morir con mi nombre en las pupilas, Ella, múltiple rosa inmaculada, Ella que era una lámpara legÃtima. Tiene razón, mucha razón, la gente Que se pasa quejando noche y dÃa De que el mundo traidor en que vivimos Vale menos que rueda detenida: Mucho más honorable es una tumba, Vale más una hoja enmohecida. Nada es verdad, aquà nada perdura, Ni el color del cristal con que se mira.
Hoy es un dÃa azul de primavera, Creo que moriré de poesÃa, De esa famosa joven melancólica No recuerdo ni el nombre que tenÃa. Sólo sé que pasó por este mundo Como una paloma fugitiva: La olvidé sin quererlo, lentamente, Como todas las cosas de la vida.
Nicanor Parra
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Poema 20
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Posted:Oct 5, 2006 8:27 pm
Last Updated:May 7, 2024 9:10 pm 9048 Views
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Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: "La noche esta estrellada, y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos. La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la querÃa. Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
OÃr la noche inmensa, más inmensa sin ella. Y el verso cae al alma como al pasto el rocÃo.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla. La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos. Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca. Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles. Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise. Mi voz buscaba el viento para tocar su oÃdo.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos. Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero. Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos, mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa, y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.
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